Las intolerancias alimentarias pueden causar diversos problemas de salud y bienestar, como trastornos digestivos, reacciones alérgicas, inflamación e incluso problemas cutáneos. Veamos qué problemas pueden surgir con las intolerancias alimentarias y cómo afrontarlos.
Trastornos digestivos: Las intolerancias alimentarias pueden provocar diversos trastornos digestivos, como hinchazón, gases, diarrea o estreñimiento. Algunas personas pueden experimentar dolor o molestias abdominales después de comer ciertos alimentos.
Reacciones alérgicas: Algunas intolerancias alimentarias pueden provocar reacciones alérgicas como picor, enrojecimiento de la piel, erupciones cutáneas, secreción nasal, dificultad para respirar o choque anafiláctico en las personas alérgicas a determinados alimentos.
Inflamación y desequilibrio de la microbiota: Las intolerancias alimentarias también pueden desencadenar procesos inflamatorios en el organismo y alterar el equilibrio de la microbiota en el intestino. Esto puede provocar una función inmunitaria deficiente, una digestión deficiente y una mayor sensibilidad a otros alimentos.
Problemas cutáneos: Algunas personas pueden experimentar problemas cutáneos como erupciones, eczema o acné debido a intolerancias alimentarias. Las reacciones cutáneas a determinados alimentos pueden ser individuales y dependen de tu tipo de piel y de la sensibilidad de tu organismo.Cómo afrontarlas:Si sospechas que tienes intolerancias alimentarias, es importante que acudas a un médico o nutricionista para que te asesore profesionalmente. Eliminar o limitar la ingesta de alimentos desencadenantes y hacer cambios dietéticos puede ayudar a mejorar tu estado y reducir los efectos negativos de las intolerancias alimentarias.